¡Hola, gente viajera! Bienvenidos a un nuevo artículo de nuestro blog de Estación Qua. En esta ocasión, seguimos con el homenaje a nuestra querida casita rodante, recordando todo el trabajo que realizamos en ella durante tres años. Hoy les compartimos un capítulo especial: la colocación de nuevas ventanas, una mejora fundamental para hacer de nuestra casita un hogar más confortable.
¿Por qué decidimos cambiar las ventanas?
Las ventanas originales de la casita estaban muy deterioradas y no cerraban herméticamente, lo que generaba problemas de aislamiento. Con el frío o el calor extremo, la falta de un buen sellado hacía que la temperatura interior fuera difícil de mantener. Sabíamos que mejorar las ventanas era una inversión clave para nuestro proyecto de viaje.
La elección de las nuevas ventanas
Al investigar opciones, nos encontramos con que las ventanas de doble acrílico importadas eran demasiado costosas, por lo que optamos por ventanas levadizas nacionales. Esta alternativa nos ofrecía una buena relación entre calidad y precio, asegurando un mejor aislamiento sin comprometer nuestro presupuesto.
Instalación: Un reto que logramos superar
Al principio, la idea de instalarlas nosotros mismos nos generaba muchas dudas. Buscamos ayuda, pero finalmente decidimos intentarlo por nuestra cuenta. Después de ver varios videos y analizar bien el proceso, nos animamos a hacerlo.
Como ya es costumbre, comenzamos el trabajo de noche para adelantar algunas tareas. Con taladro y moladora en mano, retiramos las ventanas antiguas para al día siguiente comenzar la instalación de las nuevas. Durante el proceso, también reemplazamos algunos remaches de la pared que estaban flojos. La remachadora nos dio batalla, pero logramos completar la tarea con éxito.
Por supuesto, como siempre nos pasa, nos agarró la noche terminando el trabajo. Pero al final del segundo día, todas las ventanas estaban en su lugar y el resultado nos dejó muy satisfechos.
¿Qué te pareció el resultado?
Nos encantaría saber tu opinión sobre cómo quedaron las nuevas ventanas. Déjanos tu comentario y cuéntanos si alguna vez hiciste una mejora similar en una casita rodante o vehículo camperizado.
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Seguimos compartiendo nuestra experiencia
Este es solo un capítulo más de nuestra historia con la casita rodante. Aunque ya no está con nosotros, queremos seguir recordando todo el trabajo y esfuerzo que pusimos en ella. Muy pronto subiremos más episodios de este homenaje, así que no te los pierdas.
¡Gracias por acompañarnos en esta aventura! Nos vemos en el próximo artículo y en nuestro canal de YouTube. 🚐✨